-Pixar le cede el puesto a Ice Age 4.-
Los
directores y escritores Mark Andrews y Brenda Chapman, acompasados por la
música de Patrick Doyle, nos traen Brave (cuyo
título original en inglés se traduciría como “Valiente, el oso y el arco”).

El
problema llega cuando la hija de los soberanos decide que ese estilo de vida
fuerza a su corazón a reprimir lo que quiere realmente ser: vivir como una amazona, con su pelo rojo
ondeando al viento, enzarzada en cientos de aventuras, es todo lo que ella pudiera desear. Bastante difiere su opinión de
la de sus padres, por lo que, ante una negativa a sus impulsos recién puestos
de manifiesto, nos mostrará una dosis de amplia rebeldía (más que valor, la verdad) al desobedecer
deliberadamente las órdenes de sus padres, participando en un concurso de
tiro con arco para elegir al pretendiente de la princesa.
Tras ganar sobradamente el concurso, Merida concluye que ella misma será su
propia pretendiente. La historia, a partir de este punto ,se desata
completamente. La pelirroja se decide a vivir aventuras por el mundo viajando a
hermosos lugares, derrotando al mal, escapando de diversos y grandilocuentes
peligros; al menos así se lo imaginaba ella desde la comodidad de su casa y no
corriendo por los bosques, tratando con todas sus fuerzas de resolver una maldición a contrarreloj, que
amenaza con destruir todo lo que ella ama.
Cabe
destacar el chascarrillo introducido por los guionistas al llamar a uno de los
personajes, Machintosh, ya que fue Steve Jobs quién creó la compañía en un principio, poniendo a John Lasseter a
cosechar éxitos, no sin dejar de aportar dinero de su bolsillo desde el primer
momento, llegando a asumir 50 millones
de dólares en pérdidas. En cuanto a la película en sí, nos encontramos con
el sello de Pixar más fresco que nunca, los personajes son refrescantes, de
vivos colores y muy atractivos. Solamente por el apartado visual merece pagar
la entrada.
Más allá de eso, la película
puede dejar sensaciones confusas, ya que Brave (indomable) no está al nivel de Toy Story o Up. Es más bien algo
parecido a Cars 2, una buena película,
aunque fácil de olvidar. La historia está demasiado trillada en pro de una
igualdad entre hombres y mujeres, aún lejana hoy día. Ese seguramente sea el
detalle que la hace confusa. Para los más pequeños esa parte pasa
desapercibida, están perdidos en los rizos
espectaculares de Merida y cuando recobran el sentido, ha pasado ya un buen
trecho de la película.
De seguro acabarán entretenidos, pero los chistes de
niños tardan en llegar y para los más
mayores, fuera del apartado visual,
puede que no haya mucho más interés en esta aventura fantástica. Llegados a un
punto, no llega a parecer una película propia
de Pixar, y es que hay demasiado de Disney en esta disparatada historia y
muy poco de la sensibilidad y el humor que tan característicos son en los
estudios que nos conmovieron con Up.
Brave
es, en definitiva, un aperitivo
agradable que termina sabiendo a poco. O sales totalmente encantado o
indiferente (siendo la segunda la más
común de las probabilidades). Es la peli ideal para ver con la novia o con
tus hijos, pero nunca por amor al séptimo arte. Genera expectativas muy altas
por su alto atractivo visual y al final cojea, desperdiciando la época
utilizada bajo un argumento tan manido en la actualidad, quedando así el
terreno fértil para el triunfo de Dreamworks con Ice Age 4.
NOTA: 5,8
Jorge Tomillo Soto-Jove
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