Furiosa NO es un fracaso en taquilla (opinión) | POPCOKEN


Siempre digo que estoy retirado pero luego pasan este tipo de situaciones y me toca desempolvar este blog para poner los temas importantes sobre la mesa. En este caso, hoy vengo a resucitar mi pluma palomitera para trasladar mi malestar con la prensa y con la industria del cine en general.


Desde su estreno no he parado de ver titulares donde se esmeran en recalcar a bombo y platillo que Furiosa ha sido un completo fracaso y que se ha estrellado en taquilla. Antes de abrir este melón tengo que recalcar que cada web o foro "especializado" da una cifra diferente sobre furiosa y, casualidad, la mayor parte de los textos datan de un par de semanas después del estreno. Pero tras muchas vueltas y varias visitas a la Wikipedia he averiguado que Furiosa ha terminado recaudando internacionalmente entre bastante más de 400 millones de dólares (al palo rozando los 500 por cierto), partiendo de un presupuesto de (casi) 170 millones. 


Por ende no sólo tenemos una película que ha recaudado el total de su presupuesto, si no que ha traído de vuelta más del doble y, por cierto, (casi) 100 millones más que su predecesora 'Mad Max: Fury Road'. Que no sólo no es una película de nicho a estas alturas, si no que está reconocida como una obra maestra sin paliativos. Una obra maestra que puso nervioso a Iñárritu en su día, que miraba con cara de aburguesado rancio a la gente sin presunciones del equipo de Mad Max que mientras le levantaban varios Óscars técnicos (hasta un total de 6 galardones, que no se fueron para 'El Renacido').


Antes de seguir hay que hacer un inciso llamado "marketing". Aquí entramos en aguas oscuras y profundas porque no hay cifras oficiales así que entramos en el terreno especulativo. Según ScreenRant el presupuesto total oscila entre 160 y 230 millones. Según TheDirect, que estimaban que la cinta de Miller no llegaría a los 200 millones, la cifra de gastos llegaría a cotas más altas siendo marketing únicamente unos 100 millones (270 todo el proyecto) Hasta que no haya una confirmación oficial por parte de Warner, me quedo con las cifras que tenemos, sea verdaderamente rentable o no en baremos de estudio de Hollywood (tendría que doblar los costes en taquilla para considerarse "un éxito") veréis más abajo que el tema del artículo apunta hacia un marco distinto. 


Entonces ¿por qué todo medio "serio" califica a Furiosa de fracaso y, en consecuencia, "condena" para la saga? ¿Por qué no existe esa etiqueta para la cinta que lidera Tom Hardy, pero que en realidad protagoniza Charlize Theron? La respuesta real está en esa segunda pregunta. En el caso de Fury Road, para la sociedad completa y totalmente machista que seguimos siendo, tener a la heroína en un cómodo segundo plano (por mucho que sea ella la única que hace avanzar la trama, con un Max sin propósito ni pito que tocar) deja un poso de sensación de seguridad para la falocracia más rancia que reposa sus cómodos pies blancos sobre el techo de cristal (que luego niegan que existe). 


Furiosa en Fury road es la excusa perfecta para decirle a tu niña que se pinte la cara de negro, que puede ser alguien y que puede pelear por sus sueños para luego culpar a las mujeres cuando las consumen, usan y matan otros hombres, que eran los únicos a los que había que educar desde un principio.


Charlize Theron como Imperator Furiosa es ese minuto de falsa bandera feminista que nos permitimos, para luego seguir citando únicamente nombres de directores masculinos en los top 10 de mejores películas. En cambio la Furiosa de Anya Taylor-Joy está al frente, está en primera línea de fuego y es ella la que se enfrenta al "no existente" techo de cristal. Furiosa se considera un fracaso porque el cine de acción ha sido siempre el capricho personal de los hombres tradicionalmente muy masculinos muy machos. Un cine donde ellos son héroes y ellas una excusa a la que asesinar para darle un trasfondo o una motivación a los personajes masculinos. Un cine con protagonistas y un cine con secundarias.


Furiosa pone al frente a una estrella que brilla tanto como una supernova porque no hace más que poner sobre la mesa el pie con fuerza a base de proyectos tan bien* elegidos que sus representantes no están lo bastante bien pagados, a mi parecer (*salvo por lo de New Mutants, que mejor hagamos como que no pasó). Pero Anya, chistes al margen, viene de ser una modelo a dar el salto a actriz dentro del cine de terror (con la bruja de Eggers), género que durante unos cuantos años fue suyo prácticamente. Pero el cine de acción y el cine de terror son dos cosas muy distintas y vienen de casa con percepciones muy diferentes. 



Si algo nos demostraba la cara de haberse cagado encima de Iñárritu es que el cine de acción no es considerado el cine de "auteur", cine de importancia, cine de clase alta, que es el que únicamente merece premios. Pero, pese a ser un sesgo totalmente incorrecto, lo es aún más con el de terror que se considera cine de tercera y de adolescentes en celo.


Así que tener a una "chiquilla" pisando fuerte en el terror... pues bueno, es un riesgo controlado al que quitar méritos con cierta facilidad, vale, lo comprendo (sin aprobarlo). Pero ahora que su cara asoma por cada puta esquina del planeta y ya no está en segundo plano, sino que es la cara visible de un cine arraigado en la mitología del hombre tradicionalmente masculino, (y cishetero, por cierto), se caen las caretas y afloran los comentarios rancios.


Lo que en realidad revela que Furiosa exista (y que haya ganado la pasta que ha ganado, millón arriba millón abajo) es que se fragua un cambio generacional, un relevo en las filas de la industria y en los apetitos de las supuestas generaciones de cristal. Donde la prensa nunca se ha cansado de tildar a los que vienen detrás de "iletrados cinematográficos" nos topamos con una audiencia que no sólo consume más que nunca el cine de terror, si no que huye de los grandes nombres de la industria. Los cuales por cierto hace tiempo que no aciertan una sola diana, y os miro a vosotros: Guillermo Del Toro, Martin Scorsese o Ridley Scott, por no seguir citando nombres vaya.


Al parecer la misma gente a la que no se han cansado de calificar como "enanos mentales" por ver todo blockbuster viviente y encumbrarlo como si fuera de oro, no ha tenido tanto miedo de ir a ver Furiosa al cine y devolverla a casa con casi 500 millones de recaudación. Igual la gente es más de una cosa y puede disfrutarte de 'El faro' y también de "Endgame", le pique a quien le pique. 


Aquí entraría el único debate objetivo posible: Furiosa podría parecer un fracaso a la gente que tanto disfruta de los titulares sensacionalistas porque llevamos un tiempo acostumbrados a que "un éxito en taquilla" equivale a superar los mil millones de recaudación. Pero eso es una soberana estupidez, ya que basta con ser rentable para funcionar en el mercado y Furiosa está muy por encima de la narrativa que se empeña en perpetuar la prensa (sea rentable de verdad o no). Además entraría en escena valorar la evidente saturación que eso ha causado a la industria, el hartazgo de los espectadores cansados de universos cinematográficos y las plataformas de streaming (antes y después del covid), pero ese es otro artículo.


Yo soy el primero que puede tener una opinión con sesgos, obviamente. Pero me ha costado 5 minutos de búsquedas por internet hacerme una opinión que no necesita que la respalde George R. R. Martin para tener validez. Al mismo tiempo comprendo que escuece hacerse las preguntas difíciles, pero ha quedado un tiempo estupendo para derrocar a los viejos dioses, renovar las tradiciones y pelear porque las minorías dejen de salir a la calle con miedo. Y eso (entre otras cosas bastante más serias) se logra remozando los mitos de la cultura pop, porque si toda obra mainstream que pueda consumir la siguiente generación aporta roles y discursos sesgados por la mirada masculina, aún excluyente no ya de voces femeninas si no de todas las demás voces (incluso de las masculinas si le van a la contra), esas serán las raíces de "la normalidad" para esas personas. Y ahí es donde radica el verdadero terror.


Imaginad cómo de sembrado está internet de este tipo de titulares que, si le preguntas a Chat GPT por la recaudación de Furiosa te dice que "está siendo decepcionante ya que en su fin de semana de apertura recaudó (aprox) 49 millones de dólares". El bot que absorbe lo que dice internet, cita que puede que la baja recaudación (pese a la buena crítica y recepción) "se debiera a la falta de Charlize Theron", culpando nuevamente a las generaciones que vienen detrás, solo que esta vez sin sesgo de género. Genial, Chat GPT lo ha dicho mejor que la prensa especializada, salvo porque se le olvida la recaudación total y final que, estar, está en Wikipedia querido bot.


Así que no, Furiosa no es un fracaso. Incluso aunque no fuera rentable y Wikipedia estuviera mal (incluso si el marketing la sacase de la carrera). Su valor como obra no debería estar supeditado a su perfil de rentabilidad, que no somos accionistas de la Warner, señores. Incluso si ese fuera el caso, encebollarse a insistir que la etiqueta con la que vaya a pasar a la historia sea "fracaso" y no "por fin hay nuevas caras y nuevas voces en el cine de acción tradicional" no hace más que empoderar a los dinosaurios rancios que creen que dar oportunidades a otros que no sean escala 1:1 con sus ideas es el equivalente al meteorito. Porque si algo necesita una industria a la que cada vez le cuesta más llamar a la gente a las salas de cine es aire fresco y caras nuevas. 



Jorge Tomillo Soto-Jove



Bibliografía:


-Mad Max Fury Road

- "Furiosa" fue un fracaso en taquilla y el guionista George R.R. Martin analizó el porqué

-ScreenRant: How Much Furiosa: A Mad Max Saga Cost To Make & What Box Office It Needs

-The Direct: Furisoa Box Office vs. Budget: How Much Money It's Losing Warner Bros.

-El Renacido

-La Bruja

-El faro

-Endgame (opinión)

-Furiosa (Wikipedia)

-Mad Max Fury Road (Wikipedia)

-Aún con la genialidad de George Miller, Furiosa es un fracaso en taquilla, ¿la ausencia de Hardy y Theron?

-Nuevos Mutantes

The last of us (T1) HBO | POPCOKEN

 


El mundo sin y con nosotros

Oh boy, oh boy. Esto se siente familiar. Imaginadme con una sonrisa cálida mientras escribo estas líneas. Sí, dije que me retiraba y lo mantengo, pero me he visto obligado a desempolvar la capa y añadir una entrada más a esta mi querida página web. Así que sin más dilación vamos a cumplir con el título de esta review: esta es mi crítica de la primera temporada de 'The last of us'.

Antes de entrar en materia os tengo que dar algo de contexto: yo he tenido una relación complicada con el juego. Lo compré de salida y... lo devolví. Me pareció insoportable por una sencilla razón: la prensa de videojuegos no sabe puntuar. Ni en 2013 ni hoy existen buenas formas de puntuar un videojuego, el 10 es la única medida positiva que existe y si baja de ahí "el juego es malo". Imaginad que un 7,8 pueda ser una puntuación basura, pero lo es. Así que yo escuché que TLOU era el "Ciudadano Kane de los videojuegos", algo así como el reinventor definitivo de la formula, el gran y definitivo gamechanger generacional y... no. 


TLOU es una gran historia, y un buen juego de coberturas naturalmente heredero de lo que ya hicieran otros. Es un buen sándwich: capa de sigilo, en medios buena historia y otra capa más gruesa de acción. Es el paso lógico a las tendencias narrativas y kinestéticas de la época y desde luego, no reinventa nada. Pero como es un juego que aprende tanto del cine y lo incorpora bien al lenguaje jugable... pues bueno, digamos que no me sentó bien que hablasen así de este tipo de obra. Me agobié. Más tarde lo pude jugar en PS4 y luego en PS5, incluso lo emití entero por twitch. Desde PS4, con cierta perspectiva y otra madurez sí he podido valorar sus puntos fuertes (y los flacos) en conjunto. Es un gran juego y adaptar eso ahora a un formato audiovisual se antojaba imposible.

La serie aprovecha muy y mucho a su favor el formato episódico. Neil Druckman y HBO han hecho una gran labor ordenando qué contenido debería aparecer en la serie y cual no. Esa frase es discutible dependiendo de qué expectativas tenga cada uno de lo que debería ser una adaptación de TLOU. Para algunas personas la presente falta de acción o que realmente los infectados casi ni salgan en una serie sobre ellos les escama. Lo veo lógico, no estoy de acuerdo, pero lo veo lógico. Creo que la serie ha orientado qué aparece en pantalla y qué no eligiendo un núcleo temático en torno al cual orbitar. Ese núcleo sería el amor. 

La moral de la historia es que incluso en el fin del mundo todo puede cambiar, moverse y transformarse por el amor. El amor en todas sus formas, el amor en todos sus colores, pero siempre orbitando en torno a una historia sobre las diversas caras del amor. Todos sus personajes se mueven por esa simbiosis con los demás, ese aprendizaje, ese viaje, esa intimidad. Sólo que en algunos momentos el amor se transforma y la gente impone sus necesidades a las de los demás. Ahí, la violencia se hace camino, sentenciando el futuro de los personajes de una forma u otra. 

En mi opinión la serie da una respuesta muy directa con cómo cuenta su historia "si quieres mata mata y muchos zombies, para eso ya tienes el juego" y es totalmente cierto. La serie es casi una escala 1:1 con respecto al juego, de hecho el parecido por momentos es tan cercano que empieza a surgir una sensación de innecesario en el aire. Pero deja el espacio suficiente a sus actores y el equipo creativo como para que sea una relectura y no un calco. Es cierto que se echa de menos un poco más de crueldad y que tanto humanismo acaba por suavizar el tono de la historia original, pero eso no es nada malo porque (casi) todas sus revisiones de las historias originales son buenas.

Digo ese casi principalmente por la historia de mierda de "matemos a Henry porque potato", para mí ese episodio sobraba contado de esa manera y casi hace patinar el inmenso logro que supuso el capitulo 1x03, que es de lejos el mejor de la temporada. Y es únicamente por lo añadido extra, salvo la revisión del hermano pequeño. Esta idea de humanizar a los villanos genéricos no es extraña en la obra de Druckman: en TLOU II todos los personajes que matas tienen un nombre propio y los que les sobreviven comentan cómo los mataste y arruinaste sus vidas. Pero la historia de los perseguidores de Henry es tan mala que a ratos pensaba que estaba viendo las temporadas finales de 'The Walking Dead' y casi me pego un tiro en los cojones.

Creo sinceramente que por mucho que se currasen la gran ambientación (tremendo acierto encargarles la serie al equipo de 'Chernobyl'), la música de Gustavo Santaolalla y el resto de homenajes al fan del juego, todo eso iba a dar igual si Ellie y Joel no funcionaban. Y joder que sí funcionan. 

Yo siempre le he tenido un profundo asco al Joel del juego porque me parece un puto imbécil que se justifica por su incapacidad de seguir adelante y por eso impone que todo vale a los demás, al coste que sea. Eso y que es un personaje bastante desagradable de aguantar en pantalla. Pero está hecho así de grumpy para que Ellie sea el faro que nos guie y funciona. En la serie es de una forma muy distinta. Gracias a Pedro Pascal Joel no es un personaje absurdamente unidimensional. Su humanidad dirige la historia, sus fallos y sus aciertos, llegando al punto de que se haga raro verle ser el Joel del juego a veces. 

A este Joel no le pega tomar el mismo camino que al del juego, pero se entiende que lo haga. Así el  gran trabajo de Bella Ramsey, que está a un par de octavas por debajo del carisma de la Ellie del juego se mezcla de una forma natural y más ligera. Sin embargo, gracias a la química entre ambos recorrer esta historia con sus variantes y sus tropiezos acaba resultando familiar y nueva para todos los que vemos la serie y ese es el gran acierto de esta producción. Ese y no haber convertido a Ellie en otro avatar de la cultura lolita. Bella Ramsey es una elección mucho más interesante, sobretodo cuando retrata esa fascinación natural de esta Ellie por la violencia y la muerte. Ahí le gana de calle a su versión digital.

De haber recorrido el mismo camino que el juego, paso a paso, ángulo de cámara a ángulo de cámara y demás, hubiera sido un peñazo de ver porque el medio no es el mismo. En un videojuego tú mueves la historia hacia delante, los personajes tienen que ser vehiculares y mucho más empáticos en sus decisiones. Pero en una serie se tiene que contar una historia por sí misma. Se tiene que desgranar la narrativa y los personajes se tienen que ganar el evolucionar y llegar a ser ellos mismos sin que nadie les lleve de la manita. Por eso hay menos acción y más narrativa, porque para eso, ya estaba el juego.

A nivel personal he disfrutado la serie, ahora sólo espero que sean lo bastante valientes para trasladar la historia de la segunda parte sin quitar o cambiar nada de lo que había, aunque el final de temporada apunta a que sí van a ir con todo, pero veremos. Entendería que la ampliasen en mayor o menor medida porque da mucho más pie que el primer juego, pero que lo que ya hay no se cambie, esté o no (nuevamente) el lado más incel y homófobo del fandom preparado para ello. 

Jorge Tomillo Soto-Jove

Otros enlaces:

-Chernobyl

-Serie de gameplays de The last of us I remastered (PS4)

-The last of us II no es el problema (spoilers incluidos)

Señales | POPCOKEN


Con la que está cayendo hoy en día ir al cine es algo que no hago a la ligera y que, tristemente veo espaciarse cada vez más. Entre precios y falta de verdaderos estrenos interesantes como para jugármela a exponerme a cierta pandemia, voy cada vez menos. Así que me puse a pensar y creo que podría ser bonito cubrir un puñado de películas de Shyamalan, por ello qué mejor que empezar con la que seguramente es mi favorita.


Afrontar una crítica como esta, no sabiendo quién ha visto qué me lleva a querer plantearla como si se acabase de estrenar, aunque al mismo tiempo hay que recoger el testigo del tiempo y las relecturas. En el caso de 'Señales' esto está más presente que en muchas obras del director porque es una película increíblemente juguetona y que recompensa sobremanera al espectador que la ve por segunda vez. Uno podría pensar que, sabiendo los misterios y las respuestas a todos los trucos de magia planteados la peli se quedaría sin fuelle, sin chica, pero no. 


'Señales' es una de esas películas cuyo principio siempre me sorprende porque la he visto tantas veces empezada en la tele que se me suele olvidar que sé como empieza: con todas las fichas puestas en la mesa. Shyamalan es un director que muchas veces puede quedar de obvio o pedante, porque se le suele ir la mano con los diálogos expositivos hasta parecer que sus personajes han perdido la cabeza. Eso... pasa en 'Señales' pero con truco. 


Por eso me refiero a su comienzo, porque vemos esta forma de narrar nada más empezar, justo en el tejado de la casa familiar. Pero pensamos, na na na, no puede estar "eso ahí" con trece minutos de film delante de nosotros (créditos de apertura incluidos). Así que empiezas a dudar, con una oreja puesta y una semi posición de defensa lógica hacia lo que vaya a venir de ahora en adelante.


Aquí entra Shyamalan literalmente a sembrar. 'Señales' es un baile con el espectador, con esa persona que desde el principio está buscando pistas en cada esquina, en cada fotograma, así que comienza el diálogo expositivo. Para mi, 'Señales' es una película maravillosa porque te presenta a sus personajes y sus historias mediante diálogo orgánico entre ellos, pero en medio va metiendo exposición falsa y exposición cierta. Me explico. Si todo un pueblo empieza a ver símbolos en los cultivos y se rumorea que se viene una invasión alienígena, lo normal es que todos hablen de ello y traten de encontrar respuestas a lo que pasa. Por eso es natural que la película te tire a la cara todo tipo de teorías sobre qué está pasando, pero es que también te va diciendo qué va a pasar de una forma nada sutil. 


Esta falta de sutileza es Shyamalan dejando pistas al espectador en su cara para que al acabar se sienta recompensado y tratado como un pez grande en una pecera pequeña. Pero este truco no lo notas la primera vez que ves el filme porque tú también estás dudando de las cosas que pasan y de lo que estás viendo. Eso es algo que esta película hace de forma mágica: insinuar sin mostrar. Si nos parasemos a estudiar la composición fotográfica de este filme tendríamos material para una clase entera, pero hay que tirar para adelante hacia lo importante.


'Señales' es una película que se las arregla de forma magistral para no enseñarte nada y picarte, incentivar tu curiosidad, incluso más allá de unos Mel Gibson y Joaquín Phoenix totalmente sobreactuados, a quienes rescata un doblaje magistral. Tú sabes en el fondo que hay algo ahí fuera, pero Shyamalan se las arregla para que tengas muy poca información visual de los misterios y mucha de la gente a quienes les ocurre ¿para qué hace esto? bueno, pues para lo mismo que todos los personajes hablan de cara a la cámara. 


La historia de esta película es antes un drama familiar y de fé, que una película sobre ovnis. La invasión y nosotros llegamos en un punto muy concreto de las vidas de esta familia, y por aprender su contexto nos situaremos en un marco completamente empático. Uno que forzará a la familia a avanzar en sus traumas y conflictos internos. Vaya, como si esta raza alienígena fuesen psicólogos que le quisieran decir a Mel Gibson que colarles a tus hijos una última cena y ponerte violento no está ok.


Cuando se resuelve el misterio, queda un poso suave y metido un poco a la fuerza sobre el debate de seguir o seguir la fé, pero la recompensa positiva hacia el espectador tan parecida a 'La guerra de los mundos' y tan mejor manejada, hace que aceptemos como aceptable la resolución final, ya que ni traiciona a los personajes, ni al espectador y tampoco parece querer venderte nada. Entiendo perfectamente a quienes no les guste esta película. Su forma de contar sin mostrar y centrarse en el drama familiar por encima de naves, lásers y bombas, puede hacer parecer que es una peli menor. Incluso para quienes buscaban algo más íntimo puede parecer menor, porque Shyamalan es bien especialito y a mucha gente su estilo de lanzarte info a la cara, para luego recogerla y hacerse el misterioso, no le funciona. Y lo comprendo porque yo también lo veo, pero en conjunto adoro todo el tono y misterio de esta historia.


Puede que me vea influenciado por la extraordinaria banda sonora y que sea una de mis primeras pelis vistas, pero para mi siempre tiene ese algo mágico el volver a este pequeño pueblo que no sabe qué hacer ante lo desconocido. Porque ahí es donde me posicionaría yo, aunque seguramente sería el que ve trece anuncios por la tele pero shhh, hacemos esto por la magia del cine y todo eso. Una peli fantástica, incluso por encima de sus muchas tonterías dignas de scary movie. Sólo que con buena dirección, fotografía y una música excelente. En mi caso siempre se me hará un nudo en el estómago con el flashback final de Graham en la carretera. Así como pocas cosas me pondrán los pelos de punta como el momento "batea fuerte", y eso es algo que sólo algunas pelis consiguen.

Jorge Tomillo Soto-Jove

We don't talk about Bruno y cómo contar una historia por capas. (Análisis de escena) | POPCOKEN

 He de decir que la primera vez que vi este número musical no retuve ni el 10% de la información que te tira a la cara, pero es que es MUCHA información y no es tan fácil de sacar en el primer visionado, en el cual sigo pensando que resulta excesivo visualmente. Además creo que 'Encanto' hace maravillas con su cámara y las coreografías, así que si, me he visto en la obligación de hacer un análisis de escena. Vamos a ello. y sí, con Spoilers. 

'We don't talk about Bruno' comienza en la habitación de Mirabel, un espacio empático para el espectador (un lugar seguro) por cómo nos cuentan que ese cuarto aséptico de poderes hace sentir a nuestra protagonista. Partir de este punto hacia la historia de cómo percibe su familia a Bruno, representa de maravilla el viaje de Mirabel en esta peli. Que decidan contarle sobre Bruno en su habitación da fuerza a la idea de que es un secreto prohibido. Encima toda la escena está ambientada en medias sombras para que sientas que "Bruno" como tema es un misterio envuelto en dudas y medias verdades, para que lo percibas con cierta sensación de amenaza.

Según Pepa y Félix van cediendo y, ejem, cantan todo sobre Bruno, el plano deja de ser estable, saca a Mirabel de frame y coloca la primera piedra de la narrativa por personajes contrastando al matrimonio. Ella dice que era "su boda" y él que era "nuestra boda". Lo bonito de esta primera opinión de Bruno es que está perfectamente usado el lenguaje audiovisual para demostrar que es una opinión contada por dos personas, una negativa y una positiva. Es una opinión polarizada venida de un conflicto, es parcial.

Tan pronto habla Pepa como Félix, el plano se balancea hacia la izquierda y hacia la derecha, reflejando que hay disparidad de opinión y humor en esta conversación. El eje de la cámara nunca mantiene el horizonte recto. 'Encanto' nos deja claro y reclaro que esto no es la realidad, que es subjetivo y que eso genera una situación antinatural dentro del esquema familiar, que se ve cada vez más descompensado. Todo muy apropiado si recordamos que el poder de Pepa es el clima según su humor.

La cámara pasa siempre a Mirabel como si le pasásemos la pelota, para que nos hagamos preguntas con ella y de ahí saltamos a otro miembro de la familia. Pasamos a estar dentro de la casa, con una luz velada y que recrea colores más amables. Dolores canta en un rango más bajito que los demás y cada sonido diegético que ocurre en escena suena mucho más fuerte que en el resto de la canción. Así, cada paso, gesto de vestido o roce con una caja se remarcará mucho más porque Dolores tiene el oído mucho más fino. Aquí entramos con spoilers y datos en varios niveles de capas. 

Dolores nos dice que asocia a Bruno con el sonido de la arena cayendo (como en el cuarto de Bruno, ya que ambos tienen las habitaciones pegadas) y dirá más adelante, entre las voces de los demás, que es "como si aún pudiera oírlo" por la casita. Y no es para menos, por eso la escena está ubicada dentro de la casa, porque ahí es donde realmente está Bruno. A quien, si prestamos atención podremos ver en escena. Dolores parece querer dar más información de la que le dejan. Todo su segmento tiene la cámara mucho más baja para que sea la casa la que enmarque todo el tramo de Dolores y que dudemos de nosotros al hacernos sentir chiquitos. Además la luz superlativa que entra desde arriba, mientras nuestras dos chicas se mueven entre las sombras realza la naturaleza esquiva de lo que realmente Dolores querría decir. 

Camilo hace su entrada entre los pasillos oscuros de la casa con la forma y colores de Bruno. Aquí encanto ya nos traslada directamente a una percepción parcial de Bruno, un retrato estético. Con este rango cromático y la forma en la que gesticula Camilo, va entrando en nosotros la idea de que Bruno no es una persona con buena imagen y de quien no hay que fiarse. Camilo, además, tocará todo lo relacionado con el aspecto de Bruno, ya que él mismo tiene poderes que rigen su forma y apariencia. Después, de nuevo recorriendo los bajos fondos, acabamos en el patio donde los ciudadanos dando sus opiniones sesgadas sobre el pobre Bruno y de pronto la canción cambia de tercio de forma magistral.

Todo se apaga y se vuelve mucho más íntimo según Isabela entra en escena. Mirabel la percibe de forma negativa porque "es perfecta" y donde todos han tenido premoniciones negativas sobre sus vidas, Isabela no. Para ella Bruno dijo que sus poderes se fortalecerían y que sería aún más perfecta. Pero ¿eso es algo bueno? Averiguamos después que esta premonición, aunque Mirabel la percibe como algo bueno, es un castigo para Isabela, quien lucha por salirse del encorsetamiento de ser percibida como la perfecta flor que no comete errores, ni se puede permitir fallos.

 La canción (en inglés, obvio) nos da a entender que algo está mal, aunque la cámara se mantenga estable. Cuando ella dice "he told me that the life of my dreams..." ese "me" está musicalmente alterado, deformado con un poquito de reverberación. Recurso que se repite la siguiente vez que lo dice, todo ello acompañado a la perfección por unos golpecitos de cuerda en su mismo rango tonal. Este tramo y esta premonición se basan en autoimagen y la realidad contra la que pelea en secreto Isabela. Así, aunque aún no lo sabemos nos acaban de dar otra mala noticia sobre las premoniciones.

Cuando volvemos a ver a Dolores al atardecer, mirando el exterior (al hombre de sus sueños) y volviendo dentro de casa, la canción establece un tempo de dos golpes melancólico y todos los personajes empiezan a reforzar sus opiniones de Bruno en torno a la misión de Mirabel y a la inmediatez de que no pueden escapar al casamiento de Isabela. Cuando Mirabel se decide a enfrentar todo eso y saber "la verdad y toda la verdad" el plano vuelve a desestabilizarse, reforzando ese sentimiento de antinaturalidad e inestabilidad en casa y en la familia.

En la coreografía mientras ponen la mesa los personajes, van orbitando unos a otros siguiendo el eje y ritmo de la cámara y finalmente vemos a ese personaje de la familia que no interviene en la canción con voz. Mirabel llega a la habitación de Luisa, que va perdiendo su brillo y vemos a la pobre sufriendo por arrastrar una maceta. Aquí y ahora todas las voces se pegan por tener un momento en la canción, reforzando la persecución a Mirabel mientras esta escapa y no hay ningún familiar en escena, para acabar finalmente en su cuarto, donde empezó la escena. 


Mirabel se sumerge en el vació de un soliloquio mental donde, literalmente todas las opiniones que le han dado sobre Bruno orbitan en torno a ella. La cámara gira en círculos para perfilar más esta sensación de que Mirabel está asimilando todo lo que le han dicho, mientras reconstruye la profecía sobre sí misma y obre el destino de la familia. En esta imagen vemos nuevamente a Mirabel, pero tras de ella la casa está hecha pedazos. Ella se pregunta por qué narices diría nada sobre Bruno y BAM, trueno. Fin. Maravilla.

Este número musical es una narración en múltiples capas que, sinceramente es una pasada. Como el propio filme, construye su historia desde los personajes para y por los personajes. Nunca deja que el conflicto se imponga y no deja a nadie fuera, cante o no. Al empezar y acabar en la habitación de Mirabel se crea una sensación de circularidad que hace que todo quede atado y bien explicado de forma orgánica. 

Esto hace que asimilemos lo que se dice de Bruno como algo terrorífico y que se escapa a nuestro control porque siempre terminamos las escenas con Mirabel. Escuchamos sus dudas, vemos cómo reacciona. Así la narración de sus familiares nunca la va a dejar fuera, ni se impondrá a sus dudas y necesidades, que son, por ende, las nuestras.

Ha sido un placer y una obligación analizar esta escena, ya que cada vez que la vuelvo a ver y escuchar su multinarración genera en mi sensaciones nuevas y voy descubriendo detalles qué personajes ayudan de qué manera o no a Mirabel.

Jorge Tomillo Soto-Jove