-Fassbender es el hombre tras la caja.-
-Mi retrato de Michael Fassbender, más aquí -
A
veces ocurre que el cine alberga elementos extraños en zonas concretas de su
historia. Normalmente estas historias extrañas, está encarnadas por repartos
poco conocidos que, o bien buscan lanzarse a algo más grande o bien solamente
pretenden cumplir con un fin artístico alejado de cualquier convencionalismo e
intención comercial.
-'Las múltiples vidas de Mr.Nobody'-
Un claro ejemplo bastante actual -para que nos entendamos
todos- podría ser Jared Leto, que se ha perpetuado a sí mismo como unos de los
iconos más extravagantes del cine contemporáneo. Leto siempre ha trabajado en
historias que nunca se han caracterizado por dirigirse a una comercialización
clara, más bien todo lo contrario. Con un toque especial e historias
confusas/radicales ha sabido hacer su propio estilo culminante en uno de los
oscars que nadie hubiera imaginado hace 5 años.
-Jared en 'El club de la lucha'-
'Frank' es una de esas historias, que
perfectamente podría haber protagonizado el cabecilla de la banda 30 seconds to
mars. El mayor error que se puede cometer con 'Frank', es considerar que es lo que nos venden, una comedia y está
muy lejos de serlo.
Esta película, que tiene el mismo corte de telefilm que
tenía 'Pequeña Miss Sunshine' -pero
que al tiempo se presentaba como una película con toda la amplitud de la
palabra- nos traslada a una historia carente de moraleja. Simplemente nos trata
de introducir en una realidad aumentada sobre una base real, para que al ver
sus exageraciones seamos capaces de ver el trasfondo que la compone.
-Con el cabolo hasta para presentar la peli-
Esta
historia, antes que nada es una de esas historias sobre gente corriente pero
con problemas, serios problemas mentales. Lo que tienen en común todos ellos es
que, uno de sus miembros más carismáticos, tiene más problemas que todos los
demás juntos; ese es Frank.
Se nos presenta a este extraño personaje como un
hombre adulto de mediana edad con un carisma, inventiva e imaginación
desbordantes. Su problema es que todo eso, junto a sus trastornos, lo esconde
tras una cabeza gigante de cartón -en la que está pintada una cara siniestra y
perturbadora, que sin llegar a expresar nada, resulta intimidante- tras la
cabeza de Frank se oculta Michael Fassbender.
-¿Enserio?¿Ahí debajo está Fassbender?-
Al
parecer Fassbender no se cansa de retarse a sí mismo, tan pronto se demacra
físicamente para papeles como 'Shame'
o 'Hunger', como se cuela en dramas
de época con 'Jean Eyre' o 'Un método peligroso', como se encauza
en el más comercial de los cines con 'Jonah
Hex', 'Prometheus', o cualquiera
del reinicio de X-Men. Hasta da voz a un personaje de videojuego en 'Fable III'
¿qué nuevo reto podría afrontar alguien así? -que al igual que Leto ha estado
rehuyendo a la academia por años-
Pues nada más y nada menos que interpretar a
un personaje sin usar su rostro. El reto se ve más que cumplido, toda la
película nos la pasamos con ansiedad por ver qué hay debajo de esa horrorosa
cabeza gigante ¿qué monstruosidad ha hecho este Frank consigo mismo para acabar
así? El problema crucial del filme llega con esta duda.
No
cabe duda sobre ello, Frank es el reclamo de mayor interés de todo el filme, lo
que hace de las historias que supuestamente habían de coronarlo con una
comunión perfecta, una mera pérdida de tiempo. Domhnall Gleeson, que rompió con
todo en una apoteósica interpretación en la serie de culto 'Black Mirror'
parece haberse acomodado a este género de cine casi independiente.
No es que su
nivel interpretativo o su registro se hayan reducido, es que parece
autolimitarse voluntariamente volando bajo en este tipo de films que, al final
del día no llegan a ninguna parte. Si no fuera por la curiosidad que despierta,
que una estrella en alza como es Michael Fassbender se esconda tras una cabeza
de cartón, esta película poco alcance hubiera tenido.
Seamos sinceros, no venimos
aquí por Maggie Gyllenhaal, por el pelirrojo de 'Black mirror' y 'Una
cuestión de tiempo', o por el -posible- futuro Flash y tercer pilar en discordia de 'Halt and catch fire', Scoot McNairy. La
realidad es que Fassbender con una cabeza de cartón es mucho más atrayente y
los que no vayan por quién está debajo, van por el cabezón siniestro.
La gente
no irá al cine por su banda sonora que roza la hemorragia cerebral, no irán por
su fotografía insípida e impersonal. Ni si quiera estarán en las salas de cine
-si es que llegan a pisarlas- para esperar una comedia que nunca llega a serlo,
anestesiada por la dirección sin ritmo de Lenny Abrahamson. Esta película es lo
que Sundance prometió de ella: F-A-S-S-B-E-N-D-E-R.
En
resumen, si nos gusta navegar por aguas de moderneo muy profundas, donde todo
parece nuevo pero al tiempo rancio, 'Frank'
es nuestra película. Nuestra película donde nadie de este equipo destaca y el
que se acerca a ello se camufla debajo de una máscara grotesca. Seguramente sea
el detalle de la desaparición del rostro de nuestro protagonista lo que consiga
hacer funcionar a este equipo de extraños fuera de lugar.
Lo único que pudiera
haber salvado el ritmo de la cinta hubiera sido una banda sonora más animada,
ya que si descontamos al propio Frank, nos queda un interesante análisis del
uso de las redes sociales y el tratamiento de las personas que se convierten en
su seno en iconos. 'Frank' es esa
historia que demuestra que cualquiera, tenga los problemas que tenga dentro
puede tratar de tragar lo suficiente para llegar a cumplir sus objetivos.
Al
final, aprenderá que, después de tanto tragar, solo le queda explotar en una
catarsis de desastrosos sentimientos encadenados. Si nos gusta la demolición de
lo convencional y la apuesta por la innovación y lo extraño, 'Frank' será esa
película que nos dejará satisfechos y confusos, a partes iguales. No sabremos
bien qué hemos visto, pero seguramente nos encante.
Nota: 7,4
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