-Éxodo amarillo y ¡BANANA!-
Universal Pictures parece dispuesta a comerse el mundo este año. Si sumamos ‘Fast & Furious’, ‘Jurassic World’ –sobre todo esta última- y la recién estrenada ‘Los Minions’, tenemos unas cifras dignas de envidiar. Esta semana he acudido al estreno de ‘Los Minions’ y con la sala hasta los topes puedo afirmar que, para la productora, se avecina otro éxito.
Hace un tiempo, una de mis críticas fue para ‘Gru mi villano favorito 2’, de la cual rescato la siguiente afirmación: “Universal ha explotado el efecto de ternura y bonhomía que desarrollaron los minions en la primera parte hasta la extenuación. Llegan a parecer los protagonistas de la cinta; tanto es así, que se ha anunciado una película ÚNICAMENTE protagonizada por ellos (recemos porque Gru no muera como Rayman, bajo unos personajillos presuntamente adorables que acaben por robarle el sitio)”, que hoy por fin tendrá respuesta.
No es que explotar una franquicia esté mal, cualquiera explotaría una mina de oro si se la topase debajo de su casa. Lo que está mal es saltarse la regla de oro: cuando una historia falta a su propia coherencia, por bonito que sea el envoltorio, todo se viene abajo. Esa era precisamente la idea a transmitir sobre ‘Gru mi villano favorito 2’. La falta de honestidad narrativa era total. Al parecer, Universal finalmente ha aprendido la lección, pues si algo se puede decir de ‘Los Minions’ es que son coherentes con su propia filosofía.
Este mes de julio se corona finalmente como el mes de la animación –a la sombra de los dinosaurios-. Para celebrarlo, tenemos el refrescante estreno de ‘Los Minions’. En esta ligera y entretenida aventura se establecerán las bases de estos adorables personajes que con tanto ahínco se han hecho un hueco en la cultura pop. Desde una fase celular, que se explicará en un agradable prólogo de animación 2D, partirá esta precuela. Toda la historia girará en torno a una tribu de Minions, pero, en concreto, será capitaneada por tres de ellos.
Los Minions son siervos malignos por naturaleza, de modo que, por muchas travesuras que hagan y monerías con las que nos deleiten, siempre acabarán por verse sin un cometido en la vida si no consiguen un amo al que servir. De ahí surgen nuestros tres Minions heroicos: Kevin, Stuart y Bob. Ellos serán los encargados de encontrar al criminal definitivo a quien servir y que, a ser posible, no sucumba a sus alegres torpezas.
Este heroico trio de aventureros parte, pues, en pos de el amo definitivo, un criminal digno de servir con la cabeza bien alta. Pero no todo va a ser color de rosa hasta que llegue Gru. En su infatigable búsqueda, Kevin y sus compis visitarán ciudades famosas como pueden ser Nueva York y Londres. Pero, mientras lo hacen, nos irán distribuyendo con inesperada sutileza unos cuantos guiños muy bien ideados de cultura pop.
Esta virtud era casi completamente inesperada y ha sido uno de los factores más agradables y sorprendentes de encontrar en esta aventura que, sinceramente, uno esperaba de corte mucho más básico, torpe y bobo. Sumando a esto una más que correcta puesta en escena de tópicos variados, tendremos como resultado una agradable mezcla y complementación de humores.
‘Los Minions’ abraza de lleno su naturaleza intrínseca. No podría ser más comercial aunque lo intentase, pero, aún cumpliendo de lleno eso y más, tiene cabida en esta descabellada idea un cómodo lugar para un espectador de cualquier edad. Tanto los niños más pequeños como los adolescentes, así como cualquier adulto, pueden pasárselo muy bien con estos pequeños diablillos amarillos.
Tras el gran error de balance cometido en ‘Gru mi villano favorito 2’, por fin parece que los creadores de los Minions han podido desarrollar todo su potencial creativo. Al ver ‘Los Minions’ en el cine, podemos darnos cuenta de con cuán poco funciona el carisma de estos personajes. Esta es seguro su mayor baza, pues una película en la que sus personajes hablan un lenguaje más parecido al de Los Sims que al nuestro, resulta, al menos sobre el papel, teóricamente difícil de sostener.
Pero es tal la versatilidad de estos dinámicos personajes –lo cual sólo refleja el buen trabajo de la gente que hay tras ellos- que la película no se hace aburrida en ningún punto. No hay bajones de ritmo, ni personajes fuera de lugar. Todo es un puzzle bien construido para funcionar dando una sensación de sencillez y simplicidad que es tan efectista por no intentar ir de nada que no quiera ser.
‘Los Minions’ es una comedia ligera, muy visual –de otra forma, su público de menor edad no tendría nada que le retuviera más de cinco segundos en la butaca- y sonora, pero también con un puntillo muy crítico y macarra que los más mayores disfrutarán con creces.
Posiblemente el éxito de ‘Los Minions’ haga la vida imposible a ‘Inside Out’, que aún no se estrena en nuestro país y que tratará de recoger el testigo como buenamente pueda.
Para disfrutar a todos los niveles de ‘Los Minions’ hay que tener claro lo mismo que la propia película tiene claro: esta no es una gran película, ni trascendente ni con ninguna etiqueta parecida. Es simplemente un entretenimiento puramente comercial, que, de paso que aprovecha el increíble tirón de los Minions y su merchandising, tratará de hacernos pasar el mejor rato posible con sencillez y buen hacer.
En líneas generales, ‘Los Minions’ es esa peli tronchante y refrescante que, al haber aprendido de sus errores, nos hará salir del cine con un renovado espíritu positivo. Su única contra es la evidente: si no te caen bien o te molesta su voz, mejor ni enciendas la tele. Estos diablillos estarán en todas partes y posiblemente estén aquí para quedarse. De los creadores de “Estoy harto de Frozen”, llegan “Los Minions”.
NOTA: 7,7
Jorge Tomillo Soto-Jove
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