Tres anuncios en las afueras | POPCOKEN

—¿Quién mató a Angela Hayes?—

Recientemente he visto 'Tres anuncios en las afueras', ya con pocas esperanzas respecto a este año, pero me he quedado gratamente sorprendido. Había oído grandes cosas de ella, pero también de tantas otras que no lo cumplieron, así que desconfiaba. Y cuando me topé con una película que nuevamente parecía un telefilme, desconfíe aún más. Pero desde el principio, desde cómo se muestran por primera vez esas valla de publicidad al espectador, la película me tenía. Ya fuese a venir un desastre o una gran historia, me habían atrapado. Siempre intento no saber nada del argumento de lo que quiero ver, a veces ni el título, por ello enterarme mediante las vallas del argumento del filme fue el mejor gancho posible.

Una carretera secundaria que ya casi nadie usa y una mujer que ha contratado las vallas que hay en ella para... bueno, para recriminarle a la policía cómo es posible que, tras la muerte de su hija —mientras era violada, al tiempo—, tras todo ese tiempo, nadie haya encontrado nada. El mensaje es una patada directa en la cara de todo el cuerpo de policía del pueblo y al tiempo expone la desesperación y la tragedia que tiene que sufrir una madre. 

Además, estamos hablando de uno de esos pueblos tan típicamente americanos; de esos sobre los que adora escribir Stephen King, por lo tanto todos van a posicionarse. De esta forma la madre se verá lidiando con que quien matase a su hija sigue por ahí y que todo el pueblo, va a estar en su contra. Porque la sensiblería estadounidense si está ahí para darte una palmadita por tu hija muerta, pero no les parece bien que saques tu dolor a sus calles. No necesitan un recordatorio constante de que la chica a muerto, eso les haría tener que pensar en ello o decidir si quieren involucrarse.

Cómo habréis podido leer ahí arriba, algo que me gusta especialmente de esta película es ese espíritu crítico con cada tema que toca. Incluso la propia figura de la madre no va a ser evangelizada. Que su hija haya muerto no la convierte de golpe y porrazo en madre del año, pero eso no lo vamos a ver de golpe. Porque, lo que más me gusta de 'Tres anuncios en las afueras' es su guión, que narra sin ser obvio. No llegas y hacen unas presentaciones formales. Usa más su lado thriller, para irte desgranando datos según avanza la trama o según se desarrollan los diálogos. 

Además de que, hasta un bache o dos hacia la mitad del filme y alguno más cerca del final, todo diálogo que nos presenten va a aportar algo importante al entramado que se está construyendo. Lo más especial de todo esto, es esa sensación de haber llegado tarde al baile, porque refleja la frustración reinante y cada revelación dramática va a tener un peso mucho más concreto que si acabase de ocurrir. No estamos aquí para ver 'Mystic River', si no para ver cómo les va a todos una vez que ya han recogido los platos rotos.

Una cosa que no me gusta, es que he visto en muchas webs que la película para muchos ha sido una comedia y me parece disparatado, es ridículo. Es cierto, 'Tres anuncios en las afueras' tiene momentos cómicos, pero suelen ser para aligerar carga. Porque el resto de la película use sarcasmo para caracterizar a los personajes principales, no quiere decir que nos estén invitando a reírnos. Ni si quiera es un chiste de humor negro, de hecho, todo el filme es bastante positivista, incluso a veces puede pecar de ser un poco blanco.

 El humor y el sarcasmo, son dos envoltorios para presentar más tarde motivos personales más graves, no para que riamos a carcajadas y demos palmas. Esta historia es la de un conflicto ante la perdida, no algo que quiera hacerte reír. Hay una chica a la que violaron mientras la mataban, hay un policía con un avanzado cáncer y después de eso, generosas dosis de violencia y un giro amargo tras de otro.

No todo lo que hace este guión es de oro. La historia evoluciona muy bien, y al principio cada momento tiene un peso y un tono muy especial, se desarrolla con fluidez y con mucha mano diestra. Pero una vez los personajes llegan a cierto límite, da la sensación de que no se sabe muy bien qué hacer con ellos y se los mete en una serie de situaciones, en las que no deberían estar o no de forma tan exagerada. Porque estando ahí, solamente se fuerza la coherencia y se aporta poco a la historia. Si, para los que la hayan visto, me refiero sobretodo a la escena del incendio, pero también me refiero a personajes como el de Peter Dinklage que, sinceramente, sobra en la película. No sé bien qué aporta más allá de lo evidente y le quita minutos que podrían haber mejorado personajes como el de Woody Harrelson , que no termina de funcionar tan bien como nos hacen creer y encima se utiliza como comodín para forzar a que otros funcionen.

En cuanto a nivel interpretativo y dirección, para mi todo ha ido en torno a lo funcional. Salvo Frances McDormand, que enmascara todo un personaje en sobriedad y fuerza pura. Es como la película en si, no es un diez, pero si tremendamente potente, aunque a veces no sabes muy bien a qué juega. Luego, el resto se queda un poco atrás, pero funcionan bien en relación con el relato, así que no hay mayor queja fuera de ahí.

Que nadie me entienda mal, 'Tres anuncios en las afueras' es una gran película. Aunque parezca un telefilme, no lo es. Sus limitaciones son evidentes a un nivel estético, pero al final eso es más una sensación de realidad que otra cosa. Toda la historia no tiene una gran fotografía ni cambia colores para lucirse, porque quiere que todos sus personajes mantengan los pies en la tierra, cerca del conflicto. Luego se le va un poco la olla, se crece en sí misma y está muy cerca de fastidiarlo todo, pero después, mediante sus propios recursos vuelve a encauzarse y a funcionar nuevamente en ese buen curso narrativo.

Nota: 7,7

Jorge Tomillo Soto-Jove