Sing Street | POPCOKEN


—"The riddle of the model"—

Os diré la verdad, nunca había oído hablar de esta peli y nunca le habría dado una oportunidad si no hubiera salido en ella Lucy Boynton y... me ha cautivado. Ya había visto 'Begin Again' y desde luego planeo ver 'Once', pero tampoco es que fuera para mi el paradigma del cine romántico. De hecho es un cine que tampoco me ha despertado nunca "pasión" (pun intended). En ese sentido el cine romántico se parece mucho al cine de terror: existe una imagen de "cómo" debe ser y poco o muy poco realmente acertado en relación al género. 


Todo tiene que tener ese aire a novela rosa, de esas de cómo creen los hombres que son las mujeres y qué desean ver en una pantalla. Todas pestilentes y enamoradizas, con una causa imposible y torridos reencuentros, pero mal. O puede hacerse: bien a lo grande, como 'La la land' y en una escala más humilde con 'Cómo hablar con chicas en las fiestas'. Y también se puede hacer en escalas totalmente alocadas como ´Scott Pilgrim vs The World´. Pero a quien realmente se me ha parecido más 'Sing Street' ha sido a 'Pequeña Miss Sunshine'.


'Sing Street' es una peli romántica, una en la que un chico quiere acercarse a una chica y cumplir sus sueños con ella, ese tópico lo conocemos todos, pero no lo hemos visto muchas veces sin que sea apestoso y una pastelada absurda. Donde esta película es realmente romántica es en que es una película sobre soñadores y para soñadores, pero sin tratar a nadie como si fuera idiota y al mismo tiempo reservándose muchas concesiones para sus protagonistas porque le gustan mucho. Sin embargo, eso no tiene nada de malo. 


Tenemos a un chico en el seno de una familia a la que ya no le va tan bien y que, tratando de reducir gastos, mandan al protagonista a un colegio más barato y terriblemente cristiano y puritano. Uno de esos donde todos los chicos del patio son un mundo de tópicos e inseguridades enmascaradas en poses y todo tipo de mierdas aparentes. Matones, curas maltratadores y todo ese tipo de mierda de colegio de los 80. 



Aunque no todo es una puta mierda; para cuando nuestro protagonista está bien asentado y nos cae bien porque es un pobre desgraciado adorable aparece LA chica a la salida del patio. Además hacen algo muy inteligente para presentarla y que te piques, que es dejarla de fondo en el plano, totalmente desenfocada mientras hablan de ella. Así cuando te encuentras con la magia de Lucy Boynton siendo la perfecta chica de barrio te llega el mensaje tópico, pero bien traído: esta es la misión imposible, ligar con esa chica de la que te acabas de enamorar al momento, construyendo tooodo un plan absurdamente divertido alrededor. 


Ella dice ser modelo y el chico dice que tiene una banda, que su amigo el que parece que aún se mea en la cama es productor y... de alguna forma cuela, porque ella les quiere seguir el rollo para ver hasta donde van estos niños idiotas de barrio pobre.


A partir de este punto la peli arranca de verdad. De oca en oca los chicos van haciendo una banda de críos patéticos pero bien influenciados por el hermano del prota y voilá, magia, delante de tus ojos. No es que todo sea perfecto, pero está muy bien diseñador para alimentar su propio carisma. Uno que se basa en revivir esa experiencia de ser un adolescente patético con la cabeza perdida entre las nubes de tus propios sueños, solo que, gracias a que 'Sing Street' es una película, aquí existe una posibilidad real de que, por un segundo, los sueños puedan estar al alcance de la mano. Además todas las historias secundarias refuerzan la narración principal.



Desde el principio se nos dice que no existe ya un sitio para la nueva generación de irlandeses y que muchos se van con el dinero justo para sobrevivir un par de días en londres en busca de algo mejor. Así que ver a nuestros protagonistas comprender que el sitio donde han vivido siempre se les queda pequeño y que, sorteando los obstáculos en los que otros mejores que ellos cayeron antes, podrán encontrar ellos su propio sueño a cumplir hace que la película resulte total y completamente satisfactoria.


Supongo que más de uno se sorprenderá al ver que esta peli con tintes de telefilme o de clase de ética se lleva la puntuación que tiene abajo, pero siempre repetiré que se puede contar cualquier historia, con cualquier tema y ser una gran película. Con películas románticas solo he sentido esa felicidad tres veces contadas: 'Pequeña Miss Sunshine', 'Cómo hablar con chicas en las fiestas' y ahora con 'Sing Street'. Donde otras hubieran fracasado y aburrido, 'Sing Street' añade música en los momentos exactos y perfectos para volver a lanzar el ritmo y hacerte sonreír.

Nota: 9

Jorge Tomillo Soto-Jove


No hay comentarios:

Publicar un comentario