REC | POPCOKEN


—La niña Medeiros tiene un martillo, Pablo—

Netflix está aprovechando su "particular tirón" de cuarentena, así que ya que estamos todos pegaditos a sus filas y filas de contenido mediocre, qué mejor que distribuir para esta época tan "señalada" toda todita la saga de REC (y alguna película más) y desafiar en sus redes a los espectadores a verlas. Así que —con alegría— recordé un pensamiento que tuve durante el encierro: ¿Y si hiciera críticas de REC? 



Bueno, antes de nada os pido a los nuevos y a los no tan nuevos que recordéis que 'REC' se estrenó en 2007. En ese año no sólo estábamos flipando con el Batman de Nolan, si no que estaban pegando muy fuerte las películas de terror en un formato nuevo. No es un cine que tenga carisma, calidad o ningún tipo de respeto por aquellos que lo hacen habitualmente —y señalo habitualmente, porque hay un puñado de excepciones—, así que suele buscar nuevas formas de mostrarse a sí mismo ¿Qué puede salir de este tipo de situación? Pues lo lógico, una solución barata y efectiva al problema.



 Así que en una franja de tiempo parecida se estrenan 'Paranormal Activity', 'REC' y 'Monstruoso' (en ese orden cronológico, por mucho que Paranormal no nos llegase hasta 2009). Todas ellas se acogen a este renacimiento del terror palomitero, y todas lo hacen con medalla de honor. Lo sé, lo sé, las tres son... bueno, basura... dentro de un espectro estrictamente académico y desde la perspectiva de hoy en día, pero en su momento hacer lo que hacían las tres era una locura. Paranormal fue un golpe muy fuerte en la mesa porque todos vivimos el boom de YouTube, donde un coche bajaba una colina y de pronto BOOM, sustaco. Así que posicionar una cámara y dejar que ocurrieran cosas, dio una buena dosis de sustos al público, que se creía acostumbrado al cine de terror. 



En mitad de esta ola de gritos, lágrimas y palomitas volando entra 'REC', que es una producción de terror española de esas que nos retratarían como buenos contadores de historias de miedo, y con razón. Tiene muchos méritos que pasaremos a analizar, pero haber sido pionera de esta forma, apostando por un formato único, que además tendría su vida útil en ese momento y no muchos años más, por el que no mucha gente iba a apostar sin llegar a la autoparodia. Y encima en españa, que aquí todo llegaba mínimo una década tarde. 



'REC' es una película que contó con un presupuesto de algo más del millón de euros y que recaudó más de treinta millones. ¿El factor que la hizo tan popular? su cámara, y no, no me refiero a Pablo. Todos hemos visto la tele de madrugada y nos hemos topado alguna vez con uno de esos programas de investigación, donde unos reporteros investigan asuntos turbios de la noche. Pues eso mismo hace esta película. Según se enciende la cámara lo primero que vemos es a una reportera en un parque de bomberos por la noche, para retratar cómo es la vida del bombero en el programa Mientras Usted Duerme. 


Su problema es que se pasa toda la noche deseando que pase algo para poder añadirle chispa y salsa al reportaje. Lo malo de verdad es que no sabían hasta qué punto. Reciben la llamada, siguen a los bomberos con ilusión y se meten en la puta boca del infierno. 



Unos trece minutos de película y ya se ha ido todo a tomar por saco. Corre la sangre y, aunque esté tan "mal grabado", uno no puede dejar de mirar por lo entretenido que es y porque se siente real, incluso con toda la gran dosis de sobreactuaciones que se sacan todos los actores, uno detrás de otro. Se siente real, porque somos una cámara en las manos de un par de chavales que te tienen que caer bien por la pringada que se van a comer. ¿El truco? lo acabamos de ver en el primer minuto y no nos hemos dado cuenta. En el cine hay varios trucos que se usan para que la historia que se nos va a contar tenga más veracidad. Y, al tenerla, asumimos de golpe que todo lo que se nos dice es cierto. Uno de los más comunes es el formato periodístico, o de entrevistas. 



¿Qué tiene 'REC'? pues tiene los dos de golpe y porrazo, sazonado todo con un injusto drama humano. Por eso asumes con empatía de golpe todo lo que le pase a Ángela y Pablo, porque al ser tú la cámara te implicas en lo que te están contando, y crees que, al final, algo debería salir bien. Esa creencia te impulsa hacia delante a creer que todo en la película sucede por un motivo, y lo hace, pero le da igual que se resuelva o aten los cabos.



Al menos 'REC' tiene la decencia de no tratar al espectador como si fuera idiota. Y por idiota me refiero a usar constantemente la dichosa y asquerosa exposición narrativa (uno de mis grandes motivos para dejar el anime), donde un personaje, de pronto y sin motivo, detiene la escena para explicar reglas y/o bases de la lógica de la historia que se te va a contar. Aquí eso no existe, de hecho todo dato se saca de los diálogos entre los personajes, narración que refuerza que te lo creas sin cuestionar nada, porque surge natural. 



Eso sí, pasada una hora y diez, con unos cinco minutos para acabar, meten de lleno toda la exposición que les da la gana. Pim pam, pim pam, todo mal atado y en el aire esperando que tu rellenes huecos con teorías sacadas de los diálogos de los vecinos, pero aún así, también funciona. Lo consiguen colar porque es el momento de tensión más alto de toda la película, y ya no estás para prestar atención a ritmo o narración cuando llegas aquí de nuevas. Te acojonas, te preguntas qué coño acaba de pasar y esperas dos años a la secuela. Bueno, o dos segundos y le das en Netflix y sigues con su desafío ridículo.



'REC' es una película que envejece de forma regulera, y toma algunas decisiones arriesgadas en cuanto a iluminación y contrastes que le salen bien un poco de chiripa, pero el truco de magia es tan bueno y bonito que lo que viene después no importa demasiado, porque va cumpliendo objetivos con decencia, sin caer de lleno en tópicos o explicaciones pantanosas que retrasen el avance de la trama. 



Es una hora y cuarto de cine bien de zombies, y si has venido aquí a por otra cosa, sabiendo que es cine español, y los límites que eso suele acarrear (o los tópicos que cabía esperar), uno se siente mucho más que contento. Como os dije en la crítica de 'Guns Akimbo' y en otras, se puede contar cualquier historia, mientras se haga con coherencia. Y aunque 'REC' se deja muchos cabos sueltos o toma atajos para sorprender, quemando un poco la historia, consigue sacar tantos enteros que resulta sorprendente al finalizar la película.

Jorge Tomillo Soto-Jove

Nota: 6



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