Juego de Tronos T8 (IV) 8x05 | POPCOKEN


-8x05 'The bells' (4,2)

Ha sido como ver los últimos coletazos de una bestia herida de muerte. Cuando uno no esperaba que a esta serie le quedasen más trucos en la chistera, va y aparece un capítulo como este; tan burdo y lleno de gracia como este. Un episodio que realza el poder y las miserias de la serie, sobretodo las de la última recta, y que, de nuevo se equivoca totalmente con sus personajes


El pulso visual entre Cersei y Daenerys, es una escena maravillosa. Cargada de energía y tensión. Incluso sabiendo lo que estaba por venir, me mantuvo al filo. Lo triste es que esto, al igual que todo el esplendor del episodio, me lleva a suspirar con tristeza por lo que pudo haber sido. Si tan sólo hubieran dejado a la serie seguir su propio ritmo y naturaleza, en vez de acelerarla hasta el punto de que cada nuevo episodio parece una realidad diferente, donde cuesta reconocer a los personajes.


 En esa realidad que no existe, donde todo seguía su curso y coherencia propias, el pulso hubiera sido terrorífico. La escena de la despedida de Tyrion y Jamie hubiera desgarrado corazones. O la lección de humildad para Arya hubiera sido edificante. Pero nada de esto es auténtico. Es una farsa, algo forzado que han metido con calzador. Al acabar el episodio, realmente no he sentido ver caer Desembarco del Rey ¿realmente Cersei no tenía nada más que a Euron y la Compañía dorada? ¿De verdad? ¿Arya no acude a finalizar la lista? ¿Seguro? Si tan sólo Cersei, enloquecida, urdiendo planes desbaratados, sabiéndose atrapada, hubiera sido apuñalada por lo último de Jaime Lannister. Quien por cierto, no necesitaba esa humillación final, frente al venido a más de la nada de Euron. Si tan sólo Arya, hubiera tenido una charla con Cersei en mitad del caos, donde ella escapa y la primera la sigue para terminar en la misma tesitura en la que la posiciona este episodio, pero resultando natural.



 Que cegada por su sed de venganza se hubiera encontrado con los estragos de la guerra y la locura. No sólo hubiera sido natural para Arya, hubiera sido poético y una buena historia que contar. Ahora, ver a Arya perdida por las ruinas de Desembarco del Rey, se me antoja artificial y me cuesta sacar una lectura real. Porque no veo más que los muros de cartón piedra, o los límites de unas pelucas que empiezan a rozar lo ridículo. Todo esto, toda esta falta de apego y conexión con lo que estoy viendo, es la repercusión natural de matar a la gallina de los huevos de oro. Si no puedo creerme lo que veo, empiezan a clarear las taras. Y si al final, sólo puedo ser capaz de ver las taras, el castillo se viene abajo.

Y todo esto vive a la sombra del peor manejo de personaje de toda la serie: Daenerys, coronada villana loca y genocida, porque se murió su secretaria. Por alguna razón a la serie no le bastaba con Cersei como villana definitiva, necesitaban rallar en la redundancia. Necesitaban sumergirse en la línea argumental más obvia y tonta, para que hasta el más lerdo del planeta pueda entender el mensaje: Eres lo que dicen de ti, y nada más. Al final juego de tronos no manda un mensaje sobre el poder, o la guerra. Lo que dice es que si te retratan por tu reputación o la de tu familia, terminarás por cumplirla. A menos claro que seas el favorito de la serie. Si eres Jon Nieve se te otorgarán a la fuerza todas las recompensas posibles, por mucho que trates de renegar de ellas. Jon Nieve es John Cena en 2009. 



Cuando podíamos estar ante uno de los mejores capítulos de la serie, tenemos que ver con pesar como se le da mayor peso argumental a finalizar la historia del Perro y la Montaña, por encima de cualquier otro personaje de la serie; por encima de Jamie, Daenerys, Tyrion, Cersei.... ¡Por encima de absolutamente TODOS! ¿Cuándo fue el Perro más que un secundario, para volverse el main eventer de la puta serie? ¿Qué mierda ha sido ese pobre paralelismo entre Arya y él, al filo de ambos? Ah sí, todo esto tiene la misma respuesta. La mejor fotografía de la serie tiene una misma respuesta. El destrozar todas las líneas argumentales y desarrollo de todos los personajes, tiene una misma respuesta. El más absurdo y arrebatador de los espectáculos estéticos.



Juego de Tronos, no sólo es un animal herido de muerte. Juego de Tronos lleva camino de convertirse, tanto en una parodia de sí misma, como en una estafa comprada con gusto por su audiencia a nivel mundial. Así que cuando salgan las secuelas, disfrutemos todos de ellas, porque nos las hemos ganado. 

Jorge Tomillo Soto-Jove

Enlaces a las anteriores críticas de la temporada

-8x01 y 8x02
-8x03
-8x04

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