Jurassic Park III | POPCOKEN


—"¡Alan!"—

Llevaba esperando este momento desde que acabé de ver la primera peli de Jurassic Park. Siempre he sido el típico niño de los dinosaurios, así que cuando tuve la oportunidad de ir a ver 'Jurassic Park III' al cine, fui sin dudarlo. De hecho es una de las cosas por las que le guardo cariño, porque fue de las primeras películas que elegí ir a ver de adolescente, no de esas que te llevan porque eres un niño y quieren que te calles dos horas. Esta la elegí. Y, si, lo admito, el guión de 'Jurassic Park III' está lejos de ser su punto fuere, de hecho, se podría decir sin miedo a arriesgarse que es una basura. Por eso se me hace más curioso verla una y otra vez, porque, por muy malo y básico que sea su planteamiento, el filme sabe alzarse con dignidad por encima de eso.



Estructuralmente, 'Jurassic Park III' repite lo que hizo de la primera entrega, un gran éxito, pero no con pretensiones como la segunda parte. Para esta ocasión, se va a intentar algo más apasionado, con un ritmo más de cine de acción que de aventuras, pero con poca o ninguna idea a larga distancia. Así empezamos con una escena que deje al espectador con la incógnita, pero con poco interés por lo que quiera significar. Un poco lo que hizo El mundo perdido, pero con menos gracia aún. 




Lo bueno es que JPIII rescata a Grant del olvido y lo lanza a la primera línea, con la peor excusa posible, un hombre misterioso que apele a su talón de aquiles; el dulce capitalismo. En la primera entrega Grant era un hombre conservador, apegado los métodos clásicos y un poco anti-progreso. Ahora simplemente, es un señor enfadado que, bueno, refunfuña y tiene sueños que dan para meme. Lo divertido, es que vista por segunda vez, la escena del bar donde los Kirby se anuncian como grandes magnates, es totalmente transparente. Se ve que son unos pringados mentirosos y...eso solo hace de Grant un personaje con menos trabajo en esta entrega.



 Aunque no podemos decir que haya realmente ningún personaje trabajado. Se parecen mucho a personajes de Wrestling, donde la única construcción de personaje es que, bueno; son lo que ves. Físicamente quiero decir, a ese nivel tan básico narra 'Jurassic Park III', y me dolería si fuera una película con pretensiones; una que pretenda dar clase al resto de la franquicia sobre los límites de la moral, o sobre los verdaderos y naturales procesos a respetar frente a la vida.



El problema, es que ser una película con carácter no soluciona no tener guión, ni personajes, y encima cagarte en las convicciones más básicas de los fans no ayuda. Ver a Grant y Ellie sin ser un matrimonio —o sin haberlo sido— es cagarte en 'Jurassic Park', película que construye con estos dos personajes su tema final: la unidad familiar. Joe Johnston, quien junto a Spielberg y Crichton entre otros, rechazó varios guiones por ser "demasiado complejos", afirmó no poder visualizar la idea de que Ellie y Alan Grant fuesen una pareja. 



Según él, como mucho podrían estarse separando —idea que el filme plantea pero no desarrolla como verdadero tema—. Supongo que esa lógica tan atrevidamente estúpida es lo que llevó a pensar que una derrota absoluta del T-Rex a manos del recién llegado Spinosaurio, le daría un gran subidón de popularidad a este último. Diez puntos para Joe.



El guión asoma ligeramente únicamente al principio y por, nuevamente, repetir patrones básicos de sus predecesoras. En este caso, el soltar información clave o semi-clave durante lo que parecen conversaciones casuales o transitorias. Pero son patrones tan lanzados al aire, que resulta difícil desmentir que 'Jurassic Park III' no se rebajase con agua para aproximarse a un público más joven y atrevido. Si esa era la idea, se podía haber hecho sin espantar a los fans que habían hecho de esta saga lo que era. Otros diez puntos para Joe. 



Pero ¡Eh! ¡Basta! Esta película tiene algo bueno. ¿Recordáis cuando recalqué en la crítica anterior que los patrones de luz se asignaban a la naturaleza de los dinosaurios? Bueno; luz, malo; oscuridad. Pues 'Jurassic Park III' se cuela en mitad de esa lógica.



Lo normal en estas pelis es: exposición, aterrizaje en la isla, movidas varias y el gran evento climático sucede antes del tercer acto. Pues 'Jurassic Park III' lanza ese evento, esa gran escena justo al tocar nuestros personajes tierra. Es una jugada fantástica, porque nadie esperaba en ese cine en 2001 que el maldito Spinosaurio fuese a ser el primer dinosaurio que viera a los protagonistas. Uno esperaba, dinosaurios más amables y lentos. Al lanzar este desafío al espectador pasan dos cosas en un solo instante: se ha cambiado la concepción previa del espectador, que asociaba el día y el aterrizaje a un tempo más suave y se sube la apuesta hasta el cielo. 



Y la escena sigue, de hecho sólo hay dos pausas para que respire el espectador: al estrellarse el avión en el árbol y al encontrar al Rex comiendo. El problema es que, al margen del combate, la película nunca volverá a subir tan alto. Esa subida de adrenalina, hace que el cuerpo pida más de lo mismo; traducción: para que 'Jurassic Park III'  hubiera mantenido el nivel, tenía que navegar por encima de ese ritmo. Ahí supongo que está lo de "guión demasiado complejo" para Joe.



En cuanto al dream match... han pasado años, pero sigo sin poderlo ver como algo positivo. Entiendo la idea, coronar a un nuevo villano por encima del anterior. Pero no se podía hacer en los tres minutos que dura la escena.



 Además, hay una correlación que no acabo de entender entre el Rex y Grant, como si Joe Johnston supiera dónde y cómo hacer más daño ¿eres un sádico o un idiota Joe? Aún no sé responder a eso. Sin embargo, prioriza nuevamente en los Velocirraptores para el segundo tercio del filme y, aunque todos no paran de repetir lo listos que son... no lo acabo de ver como algo tan apreciable. Si lo fueran realmente, si lo parecieran, no necesitarían recordárnoslo constantemente. 



Aunque ahí, nueva y tristemente, 'Jurassic Park III' saca a relucir su lado más "para jóvenes", que se traduce a algo así como, el espectador es idiota y necesita que se lo den todo mascado. Y esta dinámica le pesa en contra en escenas que, por ello, no terminan de despuntar tanto.

Sin embargo, no puedo condenar del todo a 'Jurassic Park III'. Si, se acabó el cine de aventuras y se lanza, no ya al blockbuster, si no al blockbuster de monstruos. Pero su ritmo es bueno, pese a no poder saciar la dosis como para sobrevivir con buena nota. JPIII es una película tremendamente entretenida, ya que sabe donde no extenderse y donde dejar que la acción, y una cámara que no para casi nunca, nos lleve hacia delante. Y lo hacen con buena mano, pero por el camino no retiene nada. No hay una experiencia o aprendizaje, y ni si quiera se ha ahondado en los principios del universo de la saga más allá de lo que ya se sabía. 



Pero salva todos estos obstáculos —donde salvar es un aprobado y poco— porque apuesta por sí misma. Casi toda la película está rodada a la luz del día, lo cual no sólo cambia los roles de su narración audiovisual, si no que la engrandece por no apostar por ahorrar en efectos y esconder errores con escenas oscuras. Sí, sé que es casi todo el tiempo el mismo escenario y que si te pones se reconocen repetidos los árboles, sí. Pero sigue sin esconderse entre las sombras, para luego venderte una supuesta "ambientación oscura y profunda". ¿Que su peor pecado es estar centrada es ser unidireccional hacia delante? Si, pero eso no es tan malo, si se tiene en cuenta que 'Jurassic Park III'  aspira únicamente al entretenimiento palomitero.




Nota: 5,6

Jorge Tomillo Soto-Jove

Si queréis leer las otras críticas, anteriores y posteriores de la saga os las dejo en los siguientes enlaces. Ha sido un placer analizar esta saga aquí. Espero que hayas disfrutado tanto como yo, y nos vemos pronto. Saludos.

-Jurassic Park III

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